La leyenda del mono prieto: Dońa Marciana Castillo
era una mujer muy temida por todos, ella vivía en la calle de la Merced, pero nadie podía saber con alguna prueba real lo que se decía de su vida, solo se sabía que era muy misteriosa y de ello no había nadie que dijera lo contrario. Ella tenía mucha plata, compraba a montones combustible en el barrio y siempre pagaba con oro, además de usar ropa de seda con los más delicado y costosos detalles, como corales, flecos y anillos en cada dedo. La casa de Dońa Marciana Castillo era el terror de muchos, ya que tenía un mono tan malo que algunos inventaban cosas terríficas del mismo, también se decía que de noche comenzaba a salir un humo más que nauseabundo de su chimenea, por otro lado se comentaba acerca de un torreón que ella tenía en la ventana, el cual se iluminaba nocturnamente. Una pobre mujer golpeada por el marido quiso pedir ayuda a la bruja para que la refugie, pero ella no quiso hacerlo, sin embargo habría desaparecido la misma, se dice que tal vez fue el mono quien hizo algo al respecto. La gente del pueblo quiso terminar con el terror de esta bruja llamando a las autoridades quienes no escucharon sus quejas, por último un día comenzaron a salir de la casa fuegos azules y rojos, nadie se acercó, cuando entraron a ver qué sucedió, encontraron sin vida a Dońa Marciana Castillo, junto a su mono que bailaba y hacia ruidos desagradables.
La leyenda de la Piedra Negra nos cuenta la historia de Misael Galán y Gildardo Higinio, ellos vivían en Zacatecas. Durante el siglo XIX ellos querían encontrar una mina de oro, el lugar donde trabajaba Misael Galán le daba más ganas aún de cumplir este sueño y su amigo lo alentaba en el tema, un día caminando encontraron un roca que tenía un aspecto muy singular y ellos se pusieron muy contentos. Sacaron con mucha fuerza la roca que habían hallado y la dejaron a un costado tirándose al lado gritando de alegría que por fin el oro estaba con ellos, no podían dejar de pensar en todo lo que harían con él, sin embargo comenzaron a desconfiar el uno del otro. El día siguiente un hombre encuentra a los dos chicos sin vida al lado de la piedra, según los médicos la causa de su extraña muerte fue una pelea entre ambos, pero lo que habían encontrado no tenía ningún valor, era solo una combinación entre arsénico y azufre. La leyenda no termina aquí, ya que se comenta que a lo largo de la historia muchas personas habían encontrado esa piedra y la confundieron con oro, sin embargo dicen que por alguna razón nadie que la codicia sale con vida.