Leyendas de dragones

Una tarde sucedió que un hada se posó en la nariz de un dragón, éste no tenía a nadie para querer, siempre andaba solo por la montaña, entonces se sorprendió de que quiera estar con él allí parada, le preguntó si no tenía miedo,

pero ella le dijo que era tan pequeña que no saciaría su hambre si lo hacía, entonces le preguntó si no pensaba que podía encerrarla para siempre en una cárcel, ella le respondió que las hadas pueden desaparecer cuando lo desean, la tercer pregunta fue si la podía amar, ella le dijo que todos quieren amar y ser amados alguna vez, no podía abrazarla porque la mataría, no podía besarla porque la prendería fuego, no podía hacer nada, por eso se puso a llorar y sus lágrimas ahogaron al hada.

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