En el comienzo de los tiempos se unieron varias tribus diferentes que tenían como fin hacer la torre más alta del mundo,
querían que la misma fuera tan alta que pudieran en ella subirse y llegar a lo alto de la cima en donde vivían Dios con el concepto de que él vivían en el cielo, no en una dimensión diferente o algo así, entonces comenzaron con la construcción que enfureció muchísimo al señor de los cielos por el atrevimiento y sobre todo porque ellos se estaban agrupando y armando en conjunto un proyecto con una intensión muy mala en sus corazones, esta obra debía ser castigada y así lo fue, Dios mandó un torbellino y de pronto cada uno de los constructores que estaban haciendo la torre en aquel momento comenzó a hablar en una lengua distinta, tan diferentes eran las mismas que no podían entenderse, este fue el modo que tuvo de separarlos, luego para terminar con esta travesía los esparció por toda la tierra, así es como se explican los diferentes idiomas del mundo, en vez de uno universal que podamos hablar todos, según estos textos que se encuentran en la misma biblia, los humanos no debemos terminar de entendernos porque atentaríamos contra Dios nuevamente.
